Hay cosas que todo el mundo sabe,
La gran mayoría sabe que este país está podrido
Elides Rojas
Sobre la marcha - EL UNIVERSAL
03.04.2011
04:21 PM
Hay cosas que todo el mundo sabe, las comenta, se dice, hasta salen publicadas en los medios o descritas en radio y televisión, pero que por alguna socialista razón se quedan como es una especie de congelador revolucionario. Muchas son delitos frontales, otras actos de traición a la patria, otras discriminación hacia los nacionales, otras tráfico de influencia y muchas irregularidades que deberían al menos generar debates públicos en instituciones como la Asamblea Nacional, pero claro, es fácil olvidar que la mejor obra de la revolución hasta ahora ha sido la destrucción de las instituciones. Muy buenos han sido. Lo malo que es que esa calidad para dinamitar todo no la han tenido para construir un país sano y viable. Pero eso es otro asunto.
Veamos ahora las diez cosas que todo el mundo sabe que ocurren en la revolución bonita.
PRIMERA: La Guardia Nacional es la principal operadora en la venta de armas y el tráfico de cualquier cosa en las cárceles venezolanas.
SEGUNDA. La Guardia Nacional tiene el control de todo lo que ocurre en las fronteras en materia de contrabando de entrada y salida de productos que van desde gasolina hasta textiles.
TERCERA: El maletinazo pillado en Buenos Aires, conocido como caso Antonini Wilson, era y es parte de un tráfico de dinero efectivo movilizado por una red compuesta y protegida por altísimos funcionarios de Gobierno tanto de Argentina como de Venezuela. Puede ser mucho más grande e internacional.
CUARTA: El Gobierno debe más de 15 mil millones de dólares a empresas transnacionales que no han podido repatriar capitales ni ganancias debido a la inexplicable falta de divisas que enfrenta la revolución.
QUINTA: Desde hace al menos cinco años los especialistas tienen perfecta evaluación de que la crisis del sistema eléctrico nacional no podrá ser resuelta por este gobierno en razón de su enorme ineficiencia, su incapacidad manifiesta y la eterna posición de estar escondiendo todo o culpando a otros. El colapso es inevitable. Igualmente habrá crisis alimentaria, crisis de empleo y crisis en Pdvsa.
SEXTA: El gobierno no tiene suficientes divisas para poner a rodar la totalidad de la economía. Se rumbeó toda la plata entre regalos, corrupción, donaciones, desorden y derroche. De allí que no otorga a tiempo las divisas que necesitan los empresarios para operar e inventa estructuras pintadas de fracaso como el Sitme o el propio Cadivi.
SEPTIMA: Chávez controla todos los poderes públicos. Tiene pleno domino del poder judicial, del poder electoral, de los militares, de los dólares, el poder moral, el legislativo. Maneja a su antojo Pdvsa, las empresas de Guayana, a los jueces. No es un presidente. Es un monarca tercermundista al peor estilo africano del siglo pasado y de esta misma centuria.
OCTAVA: Chávez tiene un 30% amarrado, conformado básicamente por pobres extremos que lamentablemente, según los esquemas de este régimen, seguirán siendo pobres eternamente, pues son el mercado electoral de Chávez. Con ese 30% y los grupos que van y vienen según les mojen las manos puede seguir ganando tantas elecciones como quiera e invente.
NOVENA: La gran mayoría tiene plena conciencia de que Chávez, aunque habla de soberanía y se declara enemigo del imperio invasor, le entregó el país a los cubanos, la economía a los chinos y la industria a todo el que quiera armar mafias mixtas. Esa misma mayoría sabe que 2012 es un horizonte fatal. Según los resultados de las elecciones, el país será otra Cuba, aunque para muchos ya el daño patrimonial y de recurso humano está hecho.
DECIMA: Lo que ha contado Makled es sobradamente conocido por la gran mayoría del país. Es como la relación del gobierno con las FARC o los grupos de choque tipo Lina Ron.
Y hay más. Este país, salvo prueba en contrario, está podrido
Twitter: @ejrl
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